La durabilidad del Alojamiento de instrumentos es uno de los factores clave para su operación estable a largo plazo. La durabilidad no solo está relacionada con la vida útil de la vivienda, sino que también afecta directamente el rendimiento general y la confiabilidad del instrumento. Una altura de instrumentos de alta calidad debe tener alta resistencia, alta dureza, resistencia a la corrosión, resistencia al desgaste y otras características para adaptarse a varios entornos de uso complejos.
La selección de material de la carcasa del instrumento es importante para resistir la corrosión química. Los materiales plásticos resistentes a la corrosión comunes incluyen la ingeniería de plásticos ABS, policarbonato (PC), polipropileno (PP), etc. Estos materiales pueden resistir la erosión de productos químicos como ácidos, álcalis y sales en cierta medida debido a su estructura química única. Por ejemplo, el material ABS se usa ampliamente en la fabricación de carcasas para equipos electrónicos y eléctricos debido a su buen rendimiento de procesamiento y resistencia a la corrosión. El policarbonato (PC) ocupa un lugar en la fabricación de carcasas de instrumentos de alta gama debido a su alta resistencia, alta transparencia y excelente resistencia a la intemperie.
Para mejorar aún más la resistencia a la corrosión de la carcasa del instrumento, los fabricantes generalmente realizan tratamientos de superficie especiales. Esto incluye agregar agentes anticorrosión y realizar tratamientos de recubrimiento de superficie. Estos tratamientos pueden formar una capa protectora en la superficie de la carcasa, aislando efectivamente el contacto directo entre los productos químicos y el material de la carcasa, extendiendo así la vida útil de la carcasa.
Al seleccionar un shell de instrumentos, su escenario de aplicación debe considerarse completamente. Por ejemplo, el caparazón del instrumento utilizado en entornos corrosivos, como laboratorios químicos, debe prestar especial atención a su resistencia a la corrosión. Los fabricantes deben seleccionar los materiales adecuados y realizar los tratamientos de superficie necesarios de acuerdo con necesidades específicas para garantizar que la carcasa del instrumento pueda funcionar de manera estable y a largo plazo en estos entornos.
El material plástico de la cubierta del instrumento no solo debe tener suficiente dureza para resistir rasguños e impactos, sino también suficiente dureza para absorber la energía de impacto. Este equilibrio entre la dureza y la dureza es la clave para garantizar la resistencia al desgaste de la carcasa. Por ejemplo, al ajustar el tipo y el contenido de los rellenos en la fórmula de plástico, se puede optimizar la dureza y la tenacidad de la carcasa. Al mismo tiempo, el uso de técnicas de procesamiento especiales, como la temperatura, la presión y el control de la velocidad durante el moldeo por inyección, también puede mejorar aún más las propiedades físicas de la carcasa.
El diseño estructural razonable también es importante para mejorar la resistencia de la cubierta del instrumento al uso físico. Por ejemplo, al aumentar el grosor de la carcasa y la adopción de medidas estructurales, como reforzar las costillas, la resistencia y la rigidez de la carcasa se pueden mejorar, mejorando así su capacidad para resistir el desgaste físico. Además, las piezas de conexión y las partes propensas a desgaste de la carcasa también necesitan un diseño especial. Por ejemplo, los métodos de fijación, como la conexión roscada o la conexión SNAP, se utilizan para garantizar que la carcasa no se suelte y cause un mayor desgaste durante el uso a largo plazo.
Para las piezas que están sujetas a fricción o desgaste frecuentes, como paneles y botones de operación de instrumentos, los fabricantes generalmente realizan tratamientos especiales resistentes al desgaste. Esto incluye agregar agentes resistentes al desgaste y usar recubrimientos resistentes al desgaste. Estas medidas de tratamiento pueden formar una capa resistente al desgaste en la superficie de la carcasa, reduciendo efectivamente el impacto de la fricción y el desgaste en la carcasa.